JUICIO A UNA ZORRA

Desde hace unos años que me he aficionado a las series y a las plataformas que nos las ofrecen sin anuncios. Odio que me corten una película o serie, es como si me cerraran de golpe un libro que estoy leyendo.


Y ayer, para mi sorpresa, me topé en HBO con algo extraño, obras de teatro en televisión. Por un momento volví a mi infancia, cuando en la primera y después en la segunda podíamos disfrutar del teatro los que aún no teníamos edad ni dinero para ir. Fue durante mi preadolescencia que descubrí algo apasionante, EL TEATRO. Con 12 hombre sin piedad, El mercader de Venecia, El enfermo imaginario, Seis personajes en busca de autor, El abanico de lady Windermere, Hamlet.... Shakespeare.... Wilde... Euripides... Sofocles....


Creo que todo aquel mundo me salvó de caer en el agujero. Esa fascinación inmensa por la herencia que nos dejó gente que ya no existía. Son los mejores recuerdos que guardo de aquella época. Junto con la lectura y cinco amigas del colegio con las que compartía todo. 

A lo que iba, ayer, por casualidad y por una pandemia que nadie sabe de donde ha salido, descubrí el teatro de nuevo en la televisión.  Y de nuevo me vi con mis 12 años encandilada ante la televisión viendo a esa Helena de Troya buscando la absolución para poder volverse polvo del camino y dejar de ser inmortal. 


Espléndida Carmen Machi (mira por donde que no me recordó para nada a esa Aida con la que triunfó en la tele) que en 67 minutos pasa de la ironía a la angustia, del sarcasmo a la piedad, del amor al odio... y sabe que solo bebiendo no derramará ni una lágrima por todo lo que pasó en su vida. Tan real como la vida misma.


La mujer más hermosa del mundo, violada a los nueve años por Teseo y a los catorce por Menelao, madre a la fuerza sin quererlo que sólo encontró consuelo en los brazo de un pastor de montaña que alguna vez se imaginó que era un príncipe. Y su amor por Paris fue su propia destrucción. Pero todo esto urdido por unos seres que habitaban el Olimpo y que se divertían y se vengaban según como se levantaran ese día. 


Cuando tenemos la sensación de que nunca hemos tomado una decisión en la vida y la única que hemos tomado nos lleva a la destrucción es cuando se nos abre un agujero negro en el universo y nos engulle. No, no somos los malos de una obra de teatro que el azar ha escrito, sólo ocurre que no podemos tomar las riendas de nuestras vidas por mucho que queramos y si lo hacemos... atengámonos a las consecuencias.


Volvamos a ser polvo para descansar.

Revisemos quien escribe la historia, siempre. 


  Críticas de los usuarios:

  Carmen de Troya
  por Lebratto
  14 de septiembre de 2020

Antes de nada, agradecer no sólo a Miguel del Arco y a Clara Roquet (los creadores de la obra), sino especialmente a Bárbara Lennie y a Irene Escolar su propuesta tan innovadora de, en tiempos de Covid en el que el teatro pende de un hilo, querer acercar 6 piezas teatrales a los espectadores a través de la pantalla y de la plataforma HBO.

En ésta, Carmen Machi encarna a la gran Helena de Troya, caída en desgracia, inmortal pero envejecida con el paso de los años y los sufrimientos, que se dirige a una audiencia cuanto menos misteriosa, para contar su versión de los hechos que marcaron la guerra y exigir ser olvidada de una vez por todas.

Además, no sólo es interesante ese declive de su persona con cada copa de vino que no deja de consumir en ningún momento, hablando a duras penas pero con una dicción perfecta, tambaleándose y mostrándose enloquecida (algo que lejos de incomodar al espectador, nos cautiva y nos atrapa en ese morbo de "que pasará"), sino que también tiene cierto mensaje feminista, proponiendo un revisiónado de la historia, libre de romanticismos o edulcorantes, con el que pretende señalar a los monstruos como monstruos y a las víctimas reales como víctimas.

Merece la pena su visionado.


https://www.rtve.es/alacarta/videos/estudio-1/estudio-1-erase-vez-tele/861526/


8 comentarios:

  1. Buenas tardes que buen enlace nos has dejado, como bien dices ver teatro en tv en blanco y negro nos hace regresar a los doce años y ver Estudo Uno.Que buena era entonces la tv. Gracias por este recuerdo que nos has compartido. Un feliz viernes.
    Abrazos.

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    1. Hola, este espacio que descubrí ayer por casualidad tiene seis obras de teatro revisadas. Escogí la de Helena de Troya porque siempre me ha gustado el tema.

      Feliz fin de semana!

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  2. Hola Charo veo muy poca televisión y sí series que me resulta mucho más cómodo.
    Buena la propuesta que nos traes, teatro y en blanco y negro.
    Tiene que ser muy interesante ver a Carmen Machín en otros registros no cómicos y como comentas hace un grandísimo papel.
    Un abrazo

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    1. Hola Conxita, yo solo veo series y películas, me niego a ver telebasura y en las noticias cada día nos engañan más. Así que prefiero escoger lo que ver y oír. En esta obra (que no es en blanco y negro, pero predomina el color rojo) Carmen Machi está esplendida, me recordó a la gran Lola Herrera en Cinco horas con Mario, que vi en un teatro de Barcelona hace muchísimos años.

      Bon cap de setmana!

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  3. querida charo me gustas vos y como escribes un abrazo desde Miami

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    1. Gracias! Desde el otro lado del charco te envío mis recuerdos.

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  4. ¡Hola, Charo!
    No soy una apasionada de la televisión, veo algunas películas y muy pocas series.
    Prefiero entretenerme con un buen libro ;)
    Revisaré con calma el link que nos dejas, espero que pueda verse también en mi país.
    Un abrazo.

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    1. ¡Hola, Mava!

      Por supuesto un libro siempre es la mejor opción. Pero también veo series, sólo las que me llaman la atención e igual con las películas. Compartimos plataformas de TV con la familia, así podemos tener más de una. La obra de teatro que describo está en HBO, y a mí me sorprendió muchísimo.

      Un abrazo

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